PEDRO BOMBO
Comienzan los carnavales, toda la gente empieza a celebrar,
las calles están de fiesta y todos los niños salen a jugar.
DANIEL VILLACREZ ARTEAGA
Estudiante de Diseño Industrial
En la
calles de la ciudad de San Juan de Pasto se encuentra un personaje a quienes
todos quieres y respetan, es PEDRO, quien con su alegría y entusiasmo irradia
la fiesta del Carnaval de Negros y Blancos acompañado de su bombo, sus platillos y su bocina.
Llega
el día más esperado, el cuatro de enero y Pedro Bombo estaba entusiasmado con celebrar pues había preparado un nuevo repertorio para poder cautivar a toda la
comunidad, pero que sorpresa se llevó al ir a recoger sus instrumentos; su
bocina se había extraviado, sus platillos y su bombo desaparecieron del lugar.
Preocupado por sus instrumentos caminó por las calles desesperado, preguntándole a la gente del paradero de sus
valiosos instrumentos. No supo que más hacer o a quién preguntar. Mientras tanto, pasan las horas y la desesperación se empieza a notar. El desfile inició sin los gritos y vitoreos de Pedro.
Este Carnaval no pudo ser el mismo, no hubo tampoco la admiración por el nuevo repertorio. La tristeza fue notable pero también la esperanza volvió a nacer, ya que la comunidad comenzó por buscar soluciones ante la falta de la alegría completa de la celebración carnavalesca. Por eso todos se unieron y aportaronn ideas para
para recuperar los instrumentos perdidos; y así, fue tanto el cariño que sentían por Pedro Bombo que decidieron comprarle unos instrumentos nuevos. Recolectaron fondos para ello, y Pedro se sintió muy feliz y en agradecimiento al
pueblo pastuso, decidió realizar una dedicatoria a toda la ciudad y en el Carnaval del siguiente año brillaría con esperanza y gratitud, brindando a propios y turistas una cálida sonrisa.
